El antes, el durante y el después
Existen dos maneras que un periodista pueda hacerte una entrevista, bien porque le hayas hecho una propuesta de contenido sobre un tema y éste considere que la mejor forma de tratarlo sea a través de una entrevista, o que el periodista te busque para que le concedas una entrevista.
Poniendo los pies en la tierra, la primera opción es la más común, a no ser que te hayas convertido en noticia debido a algún acontecimiento, o que ya hayas colaborado con el periodista en anteriores ocasiones.
Sea como fuere, la entrevista puede ser que sea para televisión, para radio o para un medio escrito, ya sea éste en papel o en digital. Te lo quiero recalcar porque según el formato se puede llevar a cabo de diferentes maneras.
En la radio y en la televisión, la entrevista puede hacerse en directo o grabada. Es lo que se suele llamar falso directo. La ventaja del falso directo es que, si te equivocas en dar un dato, se puede corregir porque antes de emitirse, la entrevista pasa por edición.
Como estarás viendo en estos últimos momentos, las nuevas tecnologías están permitiendo que la persona entrevistada no tenga porqué acudir al plató de televisión, ya que puede entrar tanto por videollamada o incluso por una llamada de teléfono.
Lo mismo sucede en la radio, donde la entrevista no tiene porqué llevarse a cabo dentro del estudio de grabación.
Sin embargo, cuando se trata de un medio escrito, el periodista puede quedar y hacerte la entrevista en persona, llamarte por teléfono y grabarla o bien pasarte las preguntas por escrito para que las contestes con mayor tranquilidad y se la devuelvas por correo electrónico.
Esto depende de lo que se pacte por ambas partes.
Pero yendo al grano, ¿cómo debes de prepararte ante una entrevista y que ésta sea inolvidable y todo un éxito para ti?
EL ANTES
Lo más fundamental y primero en hacer es preparar bien el tema que vas a tratar y lo que quieres decir. Sabes eso que se suele decir que “menos, es más”, pues en una entrevista, viene como anillo al dedo. Puedes que tengas muchas cosas que aportar al tema, pero céntrate en las ideas o líneas más importantes. Si dices muchas cosas, la audiencia se pierde porque llega un momento que no sabe qué le estás contando.
Esto que te cuento ahora, es consejo de periodista. Muchas veces, más bien la mayoría, nos molesta que nos pidas las preguntas exactas, es mejor que nos preguntes por dónde queremos encaminar la entrevista o lo que nos gustaría abordar. Ni somos policías interrogando a un delincuente, ni profesores que somete a su alumno a examen.
Incluso, es mejor para ti porque demuestras más naturalidad y no se ve tan guionizado. Diferente que la entrevista sea para un medio escrito y se haya llegado al acuerdo de enviar las preguntas por correo electrónico para responderlas. Si este es el caso, no rechaces ninguna pregunta.
Antes de responder a las preguntas es muy importante que le pases al periodista tu nombre, tus apellidos, así como tu cargo y nombre de la empresa, para que cuando rotule o te mencione no haya errores. Esto que puede parecer una tontería, es clave para tu reconocimiento.
Otro detalle a tener en cuenta a la hora de preparar la entrevista es saber a qué público te estás dirigiendo. Si se trata de un medio especializado podrás usar un lenguaje más técnico, pero si se trata de un medio generalista, lo idóneo es que uses un lenguaje claro, sencillo y que vaya acorde a tu imagen de marca.
Cuando te enfrentes a la entrevista, siempre y cuando no sea en las instalaciones del medio, debes de abordarla desde un lugar tranquilo, teniendo por delante el material que te hayas preparado para no llevarte a equívocos y teniendo resaltado o subrayado aquello que consideres que debes de decir. Pero, no lo sueltes sin sentido. Tienes que tener la habilidad de introducirlo con mucha mano izquierda.
DURANTE
Si te fijas, estamos entrando en el durante la entrevista. No te pongas nervioso o nerviosa. Piensa que es una conversación que estás teniendo con una persona y que sólo estáis ustedes dos. Eso hará que la conversación fluya de manera natural.
Como he mencionado antes, adapta tu lenguaje según el medio y su audiencia. Pero no pierdas tu esencia ni la de tu imagen de marca. Es más, puedes permitirte el lujo de nombrar tu marca durante la entrevista, pero que no parezca algo publicitario. Debes de hacerlo de manera sutil, a modo de ejemplo o a colación de alguna cuestión.
Para terminar esta fase, si has acudido a la sede del medio, muy pero que muy importante, hazte fotos. Bien con el periodista, en el plató de televisión, dentro del estudio de grabación, en la redacción del medio escrito, es decir, que se vea bien dónde has acudido.
¿Sabes para qué?
Para que cuando publiques en tus redes sociales, en tu web o en tus emails, tus clientes puedan verte hasta dónde has llegado. Como verás, estamos entrando en la recta final, en el después.
DESPUÉS
Si el periodista no se pone en contacto contigo para agradecerte tu participación, toma tú la iniciativa y darle las gracias por haberte dado esta oportunidad, así como que pueda contar contigo como fuente o como futuras colaboraciones. Es más, pídele tu intervención o bien que te diga dónde puedes conseguirla.
Cuando la tengas tienes que moverla en tus redes sociales, en tu web, en tus emails. En redes intenta nombrar al periodista agradeciendo públicamente la oportunidad.
No todo el mundo tiene el privilegio de ser entrevistado. Por este motivo, no rechaces ninguna entrevista. La entrevista es el género periodístico que más transparencia puede ver tu público y en definitiva el que puede hacer que aumente más tu credibilidad y notoriedad ante tu sector.
Antes de terminar, quiero contarte una de mis intervenciones en la tele. La quiero titular“ La entrevistadora entrevistada”.
Puede que sepas de mi lucha contra la enfermedad llamada Fibrosis Quística. Quiero dejarte la entrevista que me hicieron en los informativos de Canal Sur con motivo del Día Mundial de las Enfermedades Raras.
Esta entrevista no la propuse yo. En esta ocasión la periodista fue la que se puso en contacto conmigo. ¿Quieres saber por qué? Porque en otras ocasiones y con la misma causa, he sido yo quien ha hecho la propuesta de contenido, hasta que ha llegado el punto de ser los medios quienes me buscan cuando quieren tratar el tema de la enfermedad.
Si quieres, échale un ojo. Puede que te ayude.
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Todos los miércoles te va a llegar un email con contenido donde te espera lo mejor. Pero si ves que al final no va contigo la cosa y no quieres aprender, saber manejar tu propia comunicación o saber si a la persona que delegas esta acción lo hace bien o no, es muy simple darse de baja.
Pero ya te aseguro, que no te va a dejar indiferente y que lo que vas a ver no te lo vas a encontrar en otro sitio. Lo bueno es que ya hay seguidores que están sacando partido.
